Organizar un viaje a Indonesia requiere de bastante tiempo y paciencia si quieres aprovechar al máximo los días de vacaciones y tienes tiempo limitado, ya que es un país en el que suelen surgir muchos imprevistos.

Los transportes (aviones, barcos y autobuses) tienen poca variedad de horarios y no conectan todos los días con los mismos lugares. Es habitual llegar a una ciudad y tener que esperar hasta 3 días para poder coger un barco. Otro problema frecuente es la cancelación o retraso de vuelos sobre la marcha sin motivo aparente, que te pueden dejar sin combinación y sin poder llegar a tu destino. Muchos lugares no son accesibles en transporte público y requieren de cierta habilidad negociadora y algo de suerte para llegar en el menor tiempo posible y con el menor desembolso.

Aunque te guste descubrir los lugares a tus anchas, te recomendaría tener al menos claros los horarios y los días de los transportes entre islas para no perder demasiado tiempo en estaciones o ciudades sin interés. En Indonesia, más que en ningún otro país que haya visitado, la información es tiempo y dinero ahorrado.

Según mi experiencia, para organizar unas vacaciones en Indonesia lo mejor es seguir estos pasos:

1)   Elige qué islas quieres visitar:

Indonesia tiene 7.508 islas, de las que unas 6.000 están habitadas, así que lo primero deberá ser elegir destino. Cada isla es como un país diferente, así que en función de tus gustos deberás decantarte por unas u otras y decidir si ver varias para tener una idea global del país o recorrer una o dos en profundidad. Para facilitarte una primera selección, esta podría ser una descripción simplista de las más famosas:

Java: Es la isla donde está la capital, Jakarta, y a la que llegan la mayoría de vuelos internacionales. Lo más interesante de la isla es Jogyakarta, antigua capital, Borobudur y Prambanan y el trekking a los volcanes Bromo e Ijen.

Bali: La isla tiene dos caras opuestas: el sur es surfista, fiestero, playero y lleno de turistas extranjeros, mientras que el norte es tradicional, cultural y lleno de templos fascinantes y paisajes de arrozales. Si te va lo primero, ve hacia Kuta, si prefieres lo segundo, tu centro de operaciones deberá ser Ubud.

Lombok: Esta isla también tiene dos caras. Las 3 islas Gili (Trawangan, Air y Meno) representan diferentes niveles de fiesta y relax tipo Ibiza y Formentera, mientras que el resto de la isla permanece muy salvaje y es muy complicada de atravesar. Apenas hay transportes ni alojamientos y se requiere de un conductor local y mucha paciencia. Si te gusta el trekking, puedes hacerlo en el Parque Nacional del volcán Rinjani y ascender a su cima.

Sulawesi: Desde la gran capital (Makassar o Ujung Pandang), de la que es mejor salir pitando, se llega en 8 horas de autobús a Tana Toraja, un valle con tradiciones funerarias y artísticas milenarias. Si se sigue subiendo un par de días más, los amantes del buceo encontrarán las tranquilas islas Togean y, aún más arriba, el Parque Nacional de Bunaken, dos paraísos poco transitados. Si no se quiere pasar por Tana Toraja, es mejor volar directamente al norte de la isla.

Flores: Aunque se puede acceder también desde Bali, Flores es la isla de donde parten los barcos a Komodo y Rinca para ver dragones y hacer snorkel en los arrecifes de coral. Labuanbajo, la capital, no merece más tiempo que el que se tarde en conseguir negociar un barco en el puerto. El resto de la isla también es aventura pura para desplazarse y alojarse. Es interesante también acercarse al volcán Kelimutu.

Borneo: La zona de Kalimantán es donde se pueden visitar las reservas de orangutanes. Se pueden contratar excursiones por internet o ya en Indonesia que incluyen vuelo y 3 días remontando el río en un klotok con todo incluido.

Papua: Perfecta para gente aventurera y con dinero ahorrado. Según me contó un guía local, los trekkings por la isla suelen ser bastante duros y bastante caros, ya que toda la comida y el material tiene que traerse de fuera y cargarse con porteadores durante todo el recorrido. Lo ideal es contratar un precio cerrado por todo (vuelo, porteadores, guía, comida, alojamiento y material) con un guía experimentado una vez en Indonesia.

Sumatra: A pesar de ser una isla enorme, casi nunca es una de las opciones que se barajan en un primer viaje a Indonesia, al menos para el turista occidental. Tiene muchos parques naturales, animales, volcanes y naturaleza poco explotada. Al ser tan grande, las distancias para visitar los puntos más interesantes consumen mucho tiempo.

Resto de las islas: Solo me plantearía visitarlas si ya conocéis las anteriores u os encanta la exploración y la aventura a lo Rockefeller.

2)   Elige la duración del viaje:

Una vez elegidas la/s isla/s que se quiere/n visitar, decide cuántos días quieres estar en cada una y deja un día entero para los traslados. Si vas muy justo de tiempo y quieres ver variedad de islas, calcula un mínimo de 3-4 días enteros más el de traslado por isla. Así lo hice yo (con los transportes y el alojamiento bien planificados) y no tuve sensación de ir corriendo a todas partes, aunque me arriesgué a sufrir una cancelación que se cargara el calendario de viaje (afortunadamente no pasó). Si vas a internarte por Sulawesi, Lombok o Flores, deja más margen porque puedes tener muchas incidencias para llegar a destino. Un truco práctico es dejar Java para el final como colchón para no perder el avión de vuelta a España si te cancelan algún vuelo interno y te retrasas.

3)   Elige el orden en función del transporte:

Cuando ya sepas qué islas quieres conocer y durante cuánto tiempo, empieza a montar el puzzle del viaje. No todas las islas conectan con todas y tampoco lo hacen todos los días. Prepara una primera hipótesis de viaje (lo cansado al principio y lo relajado al final o alternando playa y montaña como hice yo) y comprueba las conexiones aéreas entre las capitales y/o los ferries. Los aviones internos son muy baratos en Indonesia (entre 30-100 euros trayecto) y aunque para los locales son un lujo, para los extranjeros son como el autobús (incluso puedes subir botellas de litro y medio en la mano y en las maletas). Los ferries son aún más baratos pero se tarda bastantes horas (o días) en llegar a cualquier destino.

4)   Compra los billetes:

Ahora que tienes un calendario aproximado y viable del viaje, plantéate si quieres comprar por adelantado los billetes o hacerlo in situ. Lo segundo te dará más flexibilidad (teniendo en cuenta de que si no puedes coger el vuelo o barco que quieres, a lo mejor tendrás que esperar dos días al siguiente) aunque lo primero te asegurará la plaza y el precio. El precio de los vuelos fluctúa bastante, aunque no es seguro que vaya a ser más caro o más barato cuanto antes lo compres.

En teoría, no se pueden comprar billetes para vuelos internos desde el extranjero, pero afortunadamente, un avispado indonesio ha montado una página web en la que por una comisión de unos 4-9 euros por billete te los compra y te los envía por mail. La página es Ticket Indonesia y es rápido y 100% fiable aunque a veces tengas que pedirle que te mande de nuevo las tarjetas de embarque porque se ven mal. No desesperes si no contesta al momento, ten en cuenta la diferencia horaria.

5)   Piensa en el alojamiento:

Aunque te guste improvisar, revisa tu plan de viaje para ver qué días llegas a horas intempestivas o en qué destinos te apetece alojarte en un hotel mejor. Los alojamientos en Indonesia no son tan baratos como en Tailandia pero por un precio más que razonable puedes alojarte en un hotel muy bueno, así que quizás te merezca la pena pasarte por Agoda o Asiarooms y echar un vistazo. Yo te recomendaría tener alojamiento reservado en Ujung Pandang en Sulawesi (eso es la ciudad sin ley y más si llegas de noche) y en Gili Trawangan si vas en temporada alta y tu avión llega tarde (si no te van a buscar del hotel en lancha va a estar complicado llegar a la isla).

Y con estos cinco pasos, ya tienes tu viaje organizado. In situ, es muy fácil conseguir taxistas, conductores privados, barcos con tripulación y guías en inglés e incluso, a veces, en español. No te olvides de ir ligero de equipaje, ¡va a ser un viaje muy movidito!

Fotos: josemarmol.es