Rémy Martin XO presentó su nueva botella en España a través de varios eventos y degustaciones. En uno de ellos pudimos realizar una cata experiencial y profundizar en su proceso de fabricación. Estas iniciativas son muy necesarias, ya que el cognac es una bebida espirituosa bastante desconocida en España para el público general y, sobre todo, para el joven.
En Estados Unidos, en cambio, los cognacs hacen product placement en videoclips para posicionarse como una bebida de lujo, como sucedió en 2013 por ejemplo con «Blurred lines» de Robin Thicke, que fue patrocinado por Rémy Martin.
¿Qué es el Cognac?
El cognac es una bebida espirituosa que se produce a partir de seis variedades de uva blanca de la zona francesa de Cognac. Se asemeja al brandy, pero al tener Denominación de Origen, tiene que cumplir una serie de requerimientos en su producción, tanto geográficas como de proceso. El 90% del cognac proviene de la uva Ugni Blanc cosechada en alguno de los 6 «crus» o regiones autorizadas por la DOC.
Otra de las características del cognac es que debe destilarse dos veces en alambique charentaise antes del 31 de marzo del año siguiente al de la vendimia. Se necesitan 9 litros de vino para obtener un litro de alcohol a 72% vol, que luego es rebajado con agua. El mínimo envejecimiento son 2 años en barricas de roble francés. Si aparece el año en la etiqueta, siempre hace referencia al destilado más joven de la mezcla.
Seguro que muchos habréis oído que en la destilación se separan las cabezas, el corazón y las colas para aislar el etanol del resto de sustancias nocivas. La destilación de cognac separa otra fracción entre el corazón y la cola, las «secondes», que tienen gran cantidad de componentes aromáticos y que se suelen incorporar a la destilación de los siguientes lotes.
Rémy Martin XO
El cognac que nos ocupa es un XO, esto quiere decir que, según la normativa, tiene que haber pasado un mínimo de 6 años en barrica. El XO de Rémy Martin, sin embargo, es una mezcla de destilados de 9 a 30 años. Dentro de un tiempo, la legislación va a obligar a los XO a tener un mínimo de 10 años, así que Rémy Martin está ya adaptándose y ofreciendo un cognac con más envejecimiento que el resto de marcas.
Rémy Martin XO es una mezcla de uvas de la varidad Ugni Blanc (Trebbiano Toscano) cosechadas en las regiones de Grand Champagne y Petite Champagne, los dos crus de más calidad. La primera de ellas aporta ligereza, gran capacidad de guarda y aromas florales gracias al terreno de arcilla y piedra caliza. Esta mezcla de los dos crus se denomina Fine Champagne. La particularidad de este cognac es que, si bien la normativa obliga a que la uva de Grand Champagne sea al menos el 50% del total, Rémy Martin XO tiene un 85%.
El vino se destila con sus lías -restos de levaduras de la fermentación- a diferencia de otras casas como Martell. Las «secondes», de las que hemos hablado antes, se incorporan en este caso en la segunda destilación como Hennessy, lo que le da mayor cuerpo y aroma.
El envejecimiento se realiza en barricas de roble francés procedentes del bosque de Limousin, que es de gran calidad debido a su baja densidad de plantación, lo que genera una madera de grano grueso. Esta composición aporta más taninos y aromas naturales de vainilla al cognac. Finalmente, Rémy Martin XO es el resultado de la mezcla experta de unos 300-400 aguardientes diferentes.
La botella
La botella se ha sofisticado para transmitir una apariencia más lujosa y elegante. Su decoración a través de gallones -segmentos cóncavos que suelen decorar los cubiertos de plata y las vajillas del siglo XVIII-, su etiqueta dorada y un cuello más alargado contribuyen a convertirlo en un gran regalo, incluso en un elemento decorativo, y le ayudan a destacar en los botelleros de los locales y los lineales de las tiendas.
Nota de cata y maridaje
La nota de cata suministrada por la marca dice: «Ciruelas e higos maduros, naranjas confitadas, flores blancas (jazmín e iris), canela y avellanas.» Se trata de un cognac muy cálido y agradable. A mí me recordó a esos pasteles ingleses de navidad que tienen miel, jengibre, frutas confitadas, vainilla y especias. El paso en boca es muy aterciopelado y el tacto es muy ligero. El final es largo, y es perfecto para maridarlo con frutas escarchadas, frutos secos, bizcochos y, sorprendentemente, queso parmesano.
Una cosa muy interesante de la cata fue la posibilidad de tener muchos elementos sobre la mesa para poder olerlos previamente y buscarlos en el cognac: varios tipos de flores, frutas escarchadas, especias, cacao… Me parece una buena manera de ir construyendo nuestra memoria olfactiva y mejorar la capacidad de cata.
El precio del Rémy Martin XO es bastante elevado, por encima de 125€, pero degustado (y disfrutado) en pequeñas cantidades os puede dar unas cuantas sobremesas interesantes.
Fotos cedidas por la marca.
